sábado, 30 de agosto de 2008

Valiente dulzura

Después de nuestro primer beso, sentí la necesidad de contarle por qué las cosas no iban a ser tan fáciles. Eran casi las 6 de la mañana, habíamos estado hablando durante horas, y él hizo ademán de irse. Antes, quiso besarme para despedirse.

-Ven, siéntate. No sé cómo empezar. Es que no es nada fácil. Me cuesta tanto decirlo... Resulta que hace unos dos años que no estoy con nadie. ¿Por qué, te preguntarás? No porque no quiera, sino porque no puedo. Hay algo que me lo impide. Es una historia complicada...

- Cuéntamelo sólo si quieres.

- Claro que quiero contártelo. El caso es que... no sé cómo hacerlo. No puedo. No me salen las palabras. Nunca he sido capaz de hablar de ello.

- No será tan grave, hombre.

- Bueno, sí lo es. Verás... es, quizá, lo peor que puedas imaginarte.

- No sé, no caigo. ¿Alguna enfermedad?

- Sí... la peor.

Después de guardar unos segundos de silencio con su mirada llena de ternura clavada en mis ojos, con la valiente dulzura que dan los veintipocos años me espetó:

- Pues cada vez tengo más ganas de besarte.

viernes, 27 de junio de 2008

Verano ¿del amor?


Tú, que decidiste que tu vida no valía,
que te inclinaste por sentirte siempre mal,
que anticipabas un futuro catastrófico,
hoy pronosticas la revolución sexual.
Tú, que decidiste que tu amor ya no servía,
que preferiste maquillar tu identidad,
hoy te preparas para el golpe más fantástico,
porqué hoy empieza la revolución sexual.
La Casa Azul 'La revolución sexual'

En este auténtico verano del amor, a veces no sé qué hacer. Si conozco a alguien que me gusta, ¿puedo por fin prepararme para el golpe más fantástico? ¿O mejor me anticipo a ese futuro catastrófico y paso de todo?

Lanzaré una botella al mar, con un mensaje simple pero desesperado. "¿Qué hacer?"

¿Qué habéis hecho vosotros? ¿Qué han hecho con vosotros? ¿Ha comenzado, tras este primer bache horrible, vuestra revolución sexual o, como mucho me temo, os han dejado claro que vuestra vida, que vuestro amor ya no vale?